La OTAN sale al frente de las acusaciones de Rusia de que las acciones de la alianza amenazan su seguridad.
El
jueves en la Conferencia de Seguridad de Moscú varios altos cargos
militares y diplomáticos rusos denunciaron que el escudo antimisil de
EEUU y la OTAN, así como las acciones de este bloque militar en Europa
del Este, representaban un riesgo para la estabilidad estratégica en la
región.
"El 16 de abril altos funcionarios rusos hicieron en Moscú varias
afirmaciones incorrectas que inducen a confusión", se destaca en un
comunicado de la portavoz de la OTAN Oana Lungescu.
Además reitera que el sistema de defensa antimisil del bloque no está
dirigido contra Rusia y tampoco constituye una amenaza para sus medios
nucleares de disuasión.
Asimismo ha subrayado que los elementos del escudo que se desplegan
en Polonia y Rumanía no tienen la capacidad de derribar los misiles
intercontinentales de Rusia.
"Son pocos (los elementos), sus posibilidades son limitadas y están
emplazados bastante lejos al sur o al revés, muy cerca de la frontera
rusa", precisó.
Por otro lado, ha rechazado que la OTAN efectúe ejercicios nucleares en Europa del Este.
"No es verdad. No hemos trasladado armas atómicas a Europa del Este", recalcó.
Tras asegurar que la posición de la OTAN respecto a este tema se
ajustaba completamente al Tratado de No Proliferación, Lungescu ha
afirmado que es Moscú el que utiliza el arma nuclear como "un
instrumento de su estrategia de intimidación".
Además apuntó que es Rusia la que ha intensificado los vuelos de sus bombarderos,
capaces de llevar armas atómicas, cerca de las fronteras de la OTAN y
la que ha amenazado con desplegar misiles nucleares en Kaliningrado y
Crimea.
La portavoz admitió que la OTAN ha aumentado su presencia militar en
Europa del Este, pero lo justificó con las acciones de Moscú en la
región.
"La OTAN va a defender a los países de la alianza ante cualquier amenaza", ha concluido Lungescu.
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