Nathan Hiller, empleado de la empresa estadounidense
Boeing, ha obtenido de la Oficina de Patentes y Marcas Registradas de
Estados Unidos una patente para un dron volador, que sería capaz de
convertirse en submarino.
De acuerdo con el documento
este dron podría convertirse en submarino debido a unos tornillos
explosivos que permiten al vehículo no tripulado deshacerse de sus alas
en el momento de la inmersión.
El vehículo no tripulado podría
servir de submarino también gracias a unas nuevas hélices, aptas para
realización de operaciones acuáticas y que aparecen en lugar de las
utilizadas durante el vuelo, informa el portal 'Business Insider'.
Además se comunica que el dron, cuya construcción aún no ha empezado,
llevará a bordo unos tanques de lastre con ayuda de los cuales el
submarino podría efectuar el control sobre profundidad de la inmersión.
En la empresa aseguran que el invento podría realizar operaciones de
reconocimiento acuático: recopilar los datos del ambiente y
transmitirlos a otros drones o puestos de mando.
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