Un grupo de científicos de la Universidad de
Wurzburgo, Alemania, inventaron un láser polaritónico. En la elaboración
tomó parte Vladímir Kulakovski del Instituto de Física del Estado
Sólido de la Academia de Ciencias de Rusia.
El láser
perfeccionado no funciona con electrones, sino con polaritones. Son
partículas compuestas, cuya energía está compuesta en parte de energía
electromagnética, y en parte de energía del medio de las propias
excitaciones. En el láser común la mayoría de los electrones se
encuentran en estado altamente energético, ya que de otra manera la
radiación no empezará. El nuevo láser puede funcionar sin esta
condición.
Otra ventaja del polaritón es su conexión y
desconexión más rápida. Las señales que emiten tales dispositivos por
línea de fibra óptica pueden ser enviadas con mucha mayor frecuencia o
con un ahorro de energía mucho mayor.
Otra propiedad de
la nueva generación de láseres es que complementarán la radiografía. Al
propio tiempo son mucho más inocuas desde el punto de vista radiológico.
Los
polaritones pueden funcionar en frecuencias de terahertz, que cuentan
con buenas perspectivas y cada vez cobran mayor popularidad en el mundo.
En Japón las frecuencias de terahertz se utilizan para la transmisión
inalámbrica de datos.
Lo interesante del caso es que en
paralelo con el grupo científico ruso-alemán, un grupo de especialistas
de la Universidad de Michigan, EEUU, se ocupaba de la elaboración de los
nuevos láseres. Estaba encabezado por el profesor de la India, Pallab
Bhattacharya. Ambos proyectos, independientemen te uno del otro,
reportaron los mismos resultados.
0 comentarios:
Publicar un comentario