Las
Fuerzas Armadas de Rusia están formando en Crimea regimientos que se
encargarán de defender la península ante eventuales ataques por mar y
aire. Las nuevas unidades formarán parte de la Flota del Mar Negro rusa,
revela Rossiyskaya Gazeta.
Según el rotativo, la defensa de la costa ha sido reforzada con un
nuevo regimiento artillero dotado de unas 300 piezas de artillería, como
el misil antitanque Khrizantema, el obús autopropulsado MSTA-S de 152
mm con guiado automático o el lanzacohetes múltiple Tornado G.
El Khrizantema es un misil capaz de destruir carros de combate e
instalaciones de ingeniería enemigas, así como objetivos en la
superficie acuática y en el aire, por ejemplo helicópteros. A su vez, el
MSTA-S puede disparar bombas inteligentes Krasnopol M con un alcance de
hasta 20 kilómetros.
Siendo una versión modernizada del Grad, el lanzacohetes Tornado G
casi triplica el alcance de su famoso predecesor, ya que es capaz de
destruir objetivos a una distancia de hasta 100 kilómetros, recuerda el
diario.
Según portavoces del Distrito Militar Sur de Rusia, en agosto próximo
el regimiento realizará una concentración en el polígono Angarski que
culminará con pruebas de tiro.
Otra novedad de Crimea es un regimiento especializado en la defensa
radiactiva, química y biológica que cuenta con unos 200 vehículos, entre
ellos el RKhM-4-01, el TMS-65U y TDA-2K.
Rossiyskaya Gazeta
© RIA Novosti. Anton Denisov
© RIA Novosti. Anton Denisov
0 comentarios:
Publicar un comentario