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El vehículo de combate ruso llamado 'Terminator',
diseñado para apoyar a los tanques, el submarino Severodvinsk o el
sistema de misiles antitanque Crisantemo-S son algunas de las armas más
novedosas del Ejército ruso.
El vehículo de combate ruso llamado 'Terminator', diseñado
para apoyar a tanques, fue creado teniendo en mente las acciones
militares que tuvieron lugar en Afganistán, cuando se hizo evidente que
los vehículos acorazados deben ser a menudo cubiertos de los ataques con
lanzagranadas o misiles teledirigidos.
El 'Terminator' es capaz de detectar una amenaza latente y destruirla
antes de que el tanque que protege reciba un golpe devastador. Tiene una
tremenda potencia de fuego proporcionada por dos cañones automáticos de
30 mm., una ametralladora de 7,62 mm., dos lanzadores de granadas
AGS-17 y cuatro misiles guiados antitanque del tipo 'Ataka' o 'kornet'.
Es una máquina de prestaciones formidables, capaz no sólo de prestar
apoyo en condiciones difíciles a los tanques y vehículos blindados, sino
también de realizar tareas independientes. De hecho, el 'Terminator' es
comúnmente llamado 'vehículo de fuego de apoyo'.
La indumentaria de combate para los soldados denominada
'Ratnik' (guerrero) forma parte de la segunda generación de uniformes.
Se diferencia de las anteriores por tener un diseño compuesto por cinco
módulos que se complementan entre sí.
La cabeza del soldado
está protegida por un casco más cómodo, más ligero y más fuerte que el
casco tradicional. También cuenta con lentes blindadas. Son ligeras,
pero pueden proteger los ojos de pequeñas esquirlas y, por supuesto, del
polvo y la suciedad. El uniforme consta de pantalones y chaqueta,
compuestos de tres capas de tela. No es inflamable, es impermeable y
evita que lo traspasen pequeñas esquirlas en el campo de batalla.
También cuenta con guantes a prueba perforaciones. El chaleco está cubierto, lo que lo hace invisible.
© RIA Novosti
El sistema antiaéreo de misiles de mediano alcance S-350E Vityaz complementa el más potente sistema de largo alcance S-300.
© wikipedia.org / Vitaly V. Kuzmin
Esta batería antiaérea al mismo tiempo es capaz de impactar 16 misiles de crucero y/o aviones, incluyendo los 'invisibles'.
El submarino nuclear ruso Severodvinsk del proyecto 885 clase Yasen fue
botado en junio de 2010 y entregado a la Armada rusa cuatro años
después, en julio de 2014.
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El sumergible Severodvinsk, que forma parte del
proyecto 885, es una nave multifuncional, ya que puede atacar no sólo
submarinos y buques de superficie, sino también a objetivos costeros.
Desplaza 8.600/13.800 toneladas y pueden navegar a una velocidad máxima
de 16/31 nudos y descender a 600 metros. Su tripulación consta de 90
hombres (32 oficiales). El armamento incluye tubos lanzatorpedos de 533
mm. y lanzaderas verticales de misiles de crucero supersónicos Oniks y
Kalibr.
Los submarinos clase Yasen cumplirán las mismas misiones que los
submarinos estadounidenses de propulsión nuclear clases Seawolf y
Virginia.
Los barcos del proyecto 21631 Buyan-M, parte destacada de las nuevas naves de la flota rusa,
están diseñados para llevar a cabo operaciones en aguas poco profundas,
pudiendo desarrollar misiones de combate incluso en los ríos.
Estos
buques son ideales para la Guardia Costera o para proteger las
plataformas de petróleo y gas. Los motores a propulsión de agua ofrecen
una gran maniobrabilidad y una mayor velocidad. Los Buyan destacan por
su capacidad de ataque, que por lo general poseen solo las fragatas.
Están armados con misiles tipo Kalibr u Onyx, capaces de golpear todo
tipo de blancos tanto en tierra como en agua. Su artillería está
compuesta por un cañón de 100 mm. de tiro rápido A-190m y un complejo de
12 cañones de 30mm AK-630M-2 Duet, único en su especie.
© RIA Novosti Vitaliy Belousov
El Crisantemo-S es el primer sistema de misiles antitanque de
tercera generación del mundo. Por primera vez se exhibió en el desfile
de la Victoria de 2013, a pesar de que el complejo fue diseñado en la
época soviética.
La principal diferencia de este complejo es que es
resistente a la intemperie. En un día claro, el cohete es inducido por
un rayo láser. Por la noche o en caso de niebla o lluvia, lo hace con la
ayuda de un radar.
El sistema de misiles puede afectar todo los tipo de
blindaje, así como a helicópteros, drones de bajo vuelo y enemigos en
sus refugios a una distancia de 400 a 6.000 metros.
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