Cassidian
ha desarrollado un nuevo sistema de inhibición para la protección de
los vehículos frente a los artefactos explosivos improvisados manejados
por radiocontrol (RCIED). El sistema analiza el
espectro de señales del entorno del vehículo e inhibe las emitidas para
la detonación de bombas con una precisión y una antelación
considerablemente mayores que las existentes hasta ahora. El aparato
también puede emplearse para el reconocimiento de señales, una labor que
hasta el momento requería el uso de sistemas más complejos, difíciles
de transportar y de alto consumo de energía.
El responsable de la sección de sensores y guerra electrónica de Cassidian, Elmar Compans,
apunta que en los actuales conflictos asimétricos “el enemigo modifica
con frecuencia el tipo de radiotransmisión de la señal de detonación”,
por lo que, explica, “es imprescindible un análisis permanente de las
amenazas y la correspondiente adaptación de contramedidas”.
Según
Compans, el inhibidor multifuncional que acaban de desarrollar “permite
satisfacer ambos requisitos de forma más rápida y movilizando menos
medios”.
Este aparato emplea la nueva tecnología ultra rápida Smart Responsive Jamming
de inhibición automática e inteligente que mejora significativamente el
nivel de protección. El sistema detecta y clasifica las señales de
radio enviadas para detonar las bombas colocadas en la carretera y
transmite en tiempo real señales de inhibición adaptadas exactamente a
la banda de frecuencias hostil. Empleando nuevas tecnologías digitales
de recepción y procesamiento de señales, el sistema garantiza unos
tiempos de reacción claramente inferiores a un milisegundo, según la
información facilitada por Cassidian.
Además, la combinación en
un dispositivo móvil de la función de inhibición con la de inteligencia
convencional de radiocomunicaciones (Electronic Support Measures, ESM)
aporta más información sobre posibles amenazas, lo que mejora
notablemente la planificación de las misiones y la protección de las
fuerzas propias.
Cassidian, que forma parte del consorcio EADS,
desarrolla, entre otros, sistemas aéreos (con y sin tripulación),
sistemas navales, sistemas terrestres, equipos de inteligencia y
vigilancia, servicios de ciberseguridad y de comunicaciones, sistemas de
pruebas, y misiles. En la actualidad cuenta con una plantilla próxima a
los 23.000 empleados y alcanza unos ingresos anuales de 5.700 millones
de euros (datos correspondientes al ejercicio 2012).
Por su
parte, EADS, de capital español, alemán y francés, desarrolla productos y
servicios de aeronáutica y de defensa a nivel mundial. En 2012, el
grupo, compuesto además de Cassidian por Airbus, Astrium, y Eurocopter, generó unos ingresos de 46.500 millones de euros. Actualmente dispone de una plantilla de 140.000 empleados.
Foto: Cassidian
Infodefensa.com
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