Fue una de las
conclusiones de la mesa redonda “Movilización yihadista en Siria e Iraq:
desafíos para España” organizada por el Real Instituto Elcano y que
tuvo lugar el miércoles en La Casa Árabe de Madrid.
La mesa redonda fue
presentada por Eduardo López-Busquets, director general de Casa Árabe y
moderada por Fernando Reinares, investigador principal de Terrorismo
Internacional del Real Instituto Elcano.
Participaron también el
director general del Instituto Español de Estudios Estratégicos (IEEE)
del Ministerio de Defensa, Miguel Ángel Ballesteros, el subdirector
general de Asuntos Internacionales de Terrorismo del Ministerio de
Asuntos Exteriores y Cooperación, Francisco de Miguel, el fiscal jefe de
la Audiencia Nacional Javier Zaragoza y Juan Carlos Marín, jefe del
área de Terrorismo Internacional del Centro Nacional de Coordinación
Antiterrorista del Ministerio del Interior.
Los expertos coincidieron en que la
principal amenaza para España es el grupo argelino “Yund al Jilafa” o
“Soldados del Califato”, escindido de Al Qaeda en el Magreb Islámico
(AQMI) que ha jurado fidelidad al Estado Islámico (IS) y que es
responsable del asesinato del ciudadano francés Pierre Hervé Gourdel.
Según Juan Carlos Marín, este grupo podría tener capacidad para atentar
en España a medio plazo.
Estos grupos actúan como captadores de simpatizantes, España es objetivo terrorista directo pero además el fenómeno de los retornados supone otra amenaza, tras actuar en Siria e Irak principalmente suponen otro elemento radicalizador en el país que les acoge en su retorno. En la mayoría de grupos islámicos se repite el mito de Al Andalus como elemento simbólico.
El Estado Islámico se está expandiendo por el Magreb y el Sahel, siendo Túnez y Argelia los principales países afectados por este fenómeno. El director del IEEE llegó a usar la expresión “los tenemos a las puertas de casa” para destacar la importancia de la amenaza. Ballesteros destacó que esta guerra ya no es una guerra asimétrica, pues el Estado Islámico ha ocupado el terreno y ejerce el terror hacia los propios musulmanes, lo que ha supuesto la ruptura con Al Qaeda.
Estos grupos actúan como captadores de simpatizantes, España es objetivo terrorista directo pero además el fenómeno de los retornados supone otra amenaza, tras actuar en Siria e Irak principalmente suponen otro elemento radicalizador en el país que les acoge en su retorno. En la mayoría de grupos islámicos se repite el mito de Al Andalus como elemento simbólico.
El Estado Islámico se está expandiendo por el Magreb y el Sahel, siendo Túnez y Argelia los principales países afectados por este fenómeno. El director del IEEE llegó a usar la expresión “los tenemos a las puertas de casa” para destacar la importancia de la amenaza. Ballesteros destacó que esta guerra ya no es una guerra asimétrica, pues el Estado Islámico ha ocupado el terreno y ejerce el terror hacia los propios musulmanes, lo que ha supuesto la ruptura con Al Qaeda.
(J.N.G.)
defensa.com
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