El Ministerio de Defensa de Egipto ha adquirido a Rusia sistemas antiaéreos S-300VM
por casi 500 millones de dólares.
De hecho, según la prensa local, la
fabricación de estas armas ya se ha iniciado y los chasis de sus
vehículos se ensamblan en la planta Kírov de San Petersburgo.
Este contrato, entre el país norteafricano y la exportadora de armas rusa Rosoboronexport, ha sido recogido por la agencia de noticias rusa RIA Novosti, que se hace eco de una información del diario económico Vedomosti, que cita dos fuentes del sector.
La agencia añade que el portal local de noticias Fontanka.ru publicó imágenes del interior de la factoría de San Petersburgo donde se veía un chasis de los citados vehículos pintado en un tono arena y destinado para un “cliente extranjero”.
El diario recoge que el contrato de los S-300VM es la
primera transacción de importancia que trasciende tras el anuncio de los
planes ruso-egipcios, y destaca el hecho de que se trate de un potente
sistema antiaéreo de largo alcance.
En este contexto también pone el
acento en que Egipto es un país que depende de la ayuda militar de Estados Unidos, pese a lo cual, “continúan viendo a Moscú como una fuente alternativa para comprar armas".
Rusia y Egipto acordaron suministros de armas al país norteafricano por más de 3.000 millones de dólares durante una visita a Moscú del nuevo presidente egipcio Abdulftah al Sisi.
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