El primer ministro polaco, Donald Tusk,
ha confirmado que el país va a continuar con el fuerte desembolso en
equipamiento militar previsto para la próxima década a pesar de la
crisis. “Los 130.000 millones de zlotys [más de 33.000 millones de
euros] que los polacos van a gastar en su defensa se dedicarán entre
otras cosas a invertir en sus capacidades”, apuntó Tusk ante un grupo de
efectivos de la Fuerza Aérea el lunes durante una visita a una base aérea emplazada en la localidad de Lask, en la parte central del país.
“Queremos que los F-16
polacos estén equipados con misiles de crucero, además queremos
desarrollar el escuadrón de misiles costeros, y vamos a desarrollar las
fuerzas especiales, que es una pieza clave de nuestras Fuerzas Armadas”,
explicó. Además, “dotaremos al ejército de vehículos aéreos sin
tripulación. Queremos invertir en dispositivos de reconocimiento”.
Tusk insistió en que la intención de su Gobierno
es emplear eficazmente y de manera razonable el dinero de los
contribuyentes polacos durante la crisis, y en este contexto enmarcó los
gastos militares.
Las Fuerzas Armadas polacas
tienen abiertos en la actualidad varios programas de compra de armamento
de gran cuantía. Entre ellos se encuentra la próxima adquisición de
setenta helicópteros polivalentes por unos 2.500 millones de euros.
También
tiene previsto emplear otros 2.500 millones de euros en la renovación
de sus sistemas antimisiles; unos 500 millones para adquirir 200 de
blindados 8x8; la compra de dos centenares de vehículos aéreos no
tripulados por algo más de 244 millones de euros; la adquisición de un
millar de tanques, y una inversión de 4.200 millones de euros en renovar
su Armada desde ahora y hasta el año 2030. En este
último punto se incluye la compra de tres submarinos, tres buques, doce
helicópteros, diez barcos no tripulados y doce drones.
Para que
las empresas extranjeras puedan acceder a alguno de estos contratos las
autoridades polacas exigen que la fabricación del material tenga lugar
en el país. Es el caso de la futura flota de helicópteros, entre cuyos
pretendientes se encuentran los fabricantes Sikorsky, AugustaWestland y Eurocopter.
En total, Varsovia
planea adquirir en la próxima década material militar por un valor de
más de 33.000 millones de euros. Con esa cantidad quiere modernizar su
actual infraestructura de defensa, heredera de la época soviética.
La mitad de la renta per cápita de España
Polonia
es uno de los pocos países europeos que escapan a la actual tendencia
de recortes en los presupuestos de defensa, en la que se encuentran
inmersos España, Gran Bretaña, Alemania, Francia, Italia, Holanda y Grecia, entre otros.
Apenas Rusia, Noruega y Turquía, que al igual que Rusia mantiene parte de su territorio en Europa,
siguen en el viejo continente la tendencia polaca de incremento de los
gastos militares, lo que despierta un especial interés en la industria
armamentística occidental.
Polonia prevé dedicar este año cerca
de 7.600 millones de euros en su defensa, un 6,7% más que en 2012. El
país cuenta con unos nueve millones de habitantes menos que España y su
renta per cápita no llega a la mitad de la de los españoles, según los
datos del Banco Mundial.
Este antiguo satélite de la Unión Soviética se unió a la OTAN en 1999, una década después de abandonar el comunismo, y pasó a formar parte de la Unión Europea en 2004.
Infodefensa.com
0 comentarios:
Publicar un comentario