La
multinacional estadounidense Bell Helicopter ha presentado su prototipo
de lo que será el futuro aparato polivalente, el V-280 Valor, con el
que espera competir en el concurso, aún no convocado, para dotar al
ejército de un helicóptero de última generación, que podría estar
operativa para 2030.
Se
trata de un nuevo proyecto con el que Bell Helicopter intenta ofrecer
una buena alternativa al V-22 Osprey, con un diseño similar, pero que no
ha dado el resultado esperado sufriendo incluso varios accidentes en
los que han llegado a morir 36 tripulantes.
La
ventaja de este tipo de ingenios aéreos es que son capaces de despegar y
aterrizar verticalmente (VTOL), hacerlo en terrenos cortos (STOL) y,
además, disponen de la gran velocidad de crucero de los aviones
turbohélice.
Entre
las características más llamativas del V-280 destaca su cola en V, su
gran ala en fibra de carbono y sus prestaciones. Según la propia
compañía, será capaz de volar a
518,6 km/h con un radio de acción de entre 926 y 1481 km. Además, dispone de dos puertas laterales, de 1,8 metros de ancho, para poder realizar el embarque de efectivos (puede llevar hasta 11 pasajeros) de la forma más rápida posible. A diferencia del V-22 Osprey, tendrá propulsores fijos, inclinándose sólo los rotores, al convertirse de modo helicóptero al de avión.
518,6 km/h con un radio de acción de entre 926 y 1481 km. Además, dispone de dos puertas laterales, de 1,8 metros de ancho, para poder realizar el embarque de efectivos (puede llevar hasta 11 pasajeros) de la forma más rápida posible. A diferencia del V-22 Osprey, tendrá propulsores fijos, inclinándose sólo los rotores, al convertirse de modo helicóptero al de avión.
En
principio, se fabricará en dos versiones, una de transporte y otra de
ataque, para reemplazar a los ya veteranos Black Hawk y Apache.
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