La
asociación de ingenieros universitarios españoles FUVE participará con
un novedoso autogiro bimotor autónomo en la competición más importante
de prototipos UAS de EEUU, del 18 al 23 de junio, impulsada por la
Oficina de Investigación de la Armada.
"Se trata de un proyecto que ha costado mucho tiempo y esfuerzo, ya que en el mundo no existe ningún drone que esté basado en un autogiro y ha habido que partir casi de cero para el software, el hardware y ha sido una verdadera pesadilla, aunque ha merecido la pena", ha explicado a Atenea el director del programa, Carlos Matilla. "Eso sí, la ventaja de contar con una autogiro para, por ejemplo, vigilancia es que su consumo de carburante es hasta un 50% inferior a otros drone de tamaño similar y, además, resulta mucho más estable. En nuestro caso hemos optado por un modelo bimotor que esperamos sea uno de los finalistas", añade.
Asimismo recuerda
que para poder competir el equipo de FUVE, integrado por seis personas,
ha contado con el apoyo de empresas como GMV y Sertec, y de organismos
oficiales como el INTA y Senasa, además de los responsables de la
Universidad Politécnica de Madrid, donde está la sede de FUVE.
Matilla destaca la importancia para España de poder contar con un equipo universitario en la que es considerada la competición más importante de este tipo en EEUU, patrocinada tanto por la asociación mundial de UAS (Sistemas aéreos no tripulados) como por la Armada estadounidense. De hecho, a ella acuden como observadores todas las grandes compañías del mundo de la Defensa: desde Boeing, hasta Northrop Grumman o BAE System con el objetivo de captar a nuevos ingenieros con ideas e, incluso, financiar proyectos que puede dar, a medio plazo, beneficios.
En
la edición de este año, en las instalaciones de la Armada en Meryland
(donde se prueba el prototipo de UAS X47, el más avanzado de EEUU)
participarán medio centenar de equipos universitarios de todo el mundo
y, por supuesto, de los centros más prestigiosos de EEUU, como UCLA, que
competirán por ganar el premio de 5.000 dólares. "Es simbólico, ya que
ser elegidos como ganadores abre las puertas de las principales
compañías de Defensa y puede situar a España en un lugar de referencia
en el desarrollo de este tipo de sistemas", destaca Matilla. Para ganar
el premio, los participantes llevarán un drone que sea capaz de volar,
de forma autónoma ( o sea sin necesidad de piloto), y de identificar un
objeto en el suelo.
http://www.revistatenea.es
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