Las
Fuerzas Armadas españolas han dejado de ser la referencia en España en
el uso de aviones no tripulados, que utilizan en las misiones de
Afganistán. ¿La razón? la Guardia Civil ha adquirido una unidad del
MQ1-Predator, fabricado por General Atomics, en una versión adaptada a
vigilancia que ya usa en EEUU la Guardia Costera desde hace años, por lo
que carece de armamento. Sin embargo, la fama de este drone le viene
dada por ser uno de los modelos más usados por el Pentágono para sus
ataques militares.
Se
trata de un gran éxito para la Guardia Civil, tras un complicado
proceso para captar los fondos de Bruselas en el que ha participado el
mismísimo director de la Benemérita, Arsenio Fernández de Mesa, quien ha
destacado que con este aparato se pondrá en marcha un nuevo modelo de
vigilancia "sin embarcaciones", que mejorará la operatividad de la
Guardia Civil en lo que atañe a sus labores de "control de las fronteras
del Sur de Europa" ante la "amenaza" que supone la inmigración ilegal y
las mafias que se lucran a costa de ella.
Según
ha explicado el responsable del proyecto, teniente coronel José Manuel
Santiago, el objetivo es poder "tener una alerta anticipada de lo que
está sucediendo y no esperar a que lleguen a las costas españolas ni los
flujos de inmigración ni las mafias". Según el programa previsto, el
plan estará plenamente operativo en 2017 "y la idea es homogeneizarlo
con el resto de los cuerpos de seguridad, dedicados a la vigilancia
fronteriza, de la Unión Europea".
La
Guardia Civil integrará el Predator con otros dos vehículos no
tripulados, de menor tamaño y autonomía, que también utilizará en sus
labores de control de costa, sobre todo en Canarias, y de vigilancia del
narcotráfico.
El
interés de la Guardia Civil por este tipo de vehículos viene de hace
muchos años. En 2008, sus responsables probaron el Camcopter S-100
Schiebel, además del Predator en 2009 para labores de vigilancia
marítima. Con las conclusiones de estas pruebas, la Benemérita puso en
marcha el programa Minerva, para estudiar la viabilidad de usar drones
para sus labores de vigilancia en las costas.
Actualmente,
sólo disponen de MQ1-Predator los siguientes países: Estados Unidos,
Reino Unido, Turquía, Marruecos y Emiratos Árabes.
La compra del Predator ha sido posible gracias a la participación de la Guardia Civil en el proyecto Closeeye, financiado por el VII Programa Marco de Investigación y Desarrollo de la Comisión Europea, y con un presupuesto cercano a los 12,25 millones de euros, de los cuales las autoridades europeas asumen 9,2 millones de euros.
La compra del Predator ha sido posible gracias a la participación de la Guardia Civil en el proyecto Closeeye, financiado por el VII Programa Marco de Investigación y Desarrollo de la Comisión Europea, y con un presupuesto cercano a los 12,25 millones de euros, de los cuales las autoridades europeas asumen 9,2 millones de euros.
J.M.Vera
http://www.revistatenea.es
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