Brasil se protegerá con complejos antiaéreos rusos

 

 

El Gobierno de Brasil confirmó la compra de tres baterías de los sistemas antiaéreas rusos Pantsir-S1. El contrato presupone la cooperación técnica, ciertas modificaciones del complejo y la formación de los empleados de la empresa de mantenimiento.

 

El valor del suministro alcanzaría 1.000 millones de dólares estadounidenses. "De momento nos concentramos en solucionar cuestiones tácticas como la estructura del contrato y la entrega de las tecnologías", comentó una fuente en el Ministerio de la Defensa de Brasil al periódico ruso 'Vzgliad'. 

En septiembre el grupo de trabajo brasileño viajará a Rusia para ultimar la lista de modificaciones técnicas y en octubre o diciembre se firmará el contrato, afirmó el funcionario.

Un complejo antiaéreo universal

Pantsir-S1 es el complejo antiaéreo más moderno de Rusia. Posee dos bloques de combate consistentes cada uno en seis misiles antiaéreos hipersónicos y dos cañones del calibre 30. El complejo tiene un sistema de localización de blancos avanzado que permite intercambiar datos con los sistemas de misiles y de artillería, además de ofrecer una imagen visual detallada de cualquier objetivo.

"El Pantsir-S1 es un complejo universal para la protección de objetos claves", dijo Yuri Savénkov, vicegerente de la Oficina de Diseño de Instrumentos KBP, la empresa constructora del complejo. El sistema puede atacar cualquier objeto que vuele a una altura de entre 15 metros y 15 kilómetros, ya sea un avión, un misil, un dron u cualquier otro aparato. Además, los misiles pueden también atacar los blancos terrestres. 

Asimismo, es el único sistema antiaéreo del mundo capaz de atacar objetivos en pleno movimiento: el Pantsir no necesita período de preparación para abrir fuego.

Cooperación ruso-brasileña

En el marco del contrato Rusia suministrará a Brasil tres baterías de los Pantsir-S1. Además, los especialistas rusos instruirán a los empleados de la empresa brasileña ODEBREHT Defensa e Tecnologia, que se encargará del mantenimiento de los complejos y de la producción de las municiones para los cañones.

También se planea que Moscú participe en el proyecto del desarrollo de un sistema antiaéreo propio de Brasil con componentes producidos en el país americano. Como primer paso de este programa, los complejos rusos se adaptarán para poder ser instalados en los camiones brasileños.

Brasil ya ha comprado a Rusia automóviles blindados Tigr, helicópteros de ataque Mi 35 y helicópteros de transporte Mi 26. Existe un acuerdo sobre el empleo del sistema de navegación rusa Glonass en Brasil. Los países también podrían cooperar en el sector aeroespacial.

© RIA Novosti Vitaliy Belousov