A finales del 2011
autoridades mexicanas habían capturado 45 lanzagranadas de 40mm en manos
del cártel del Golfo. Dos años después de ese incidente, en Guatemala
se reportaba la perdida de munición de 40mm.
La denuncia número
C662/2013 del Ministerio Público, del 16 de marzo, especificaba que
habían desaparecido unas 1.449 granadas de fragmentación de 40
milímetros, propias para el lanza granadas M-79 y M203. Las granadas se
habían extraviado del polvorín de la Primera Brigada de Infantería, y
la que funciona dentro de las instalaciones del Comando Aéreo del Norte,
en Petén.
En esos días, autoridades guatemaltecas también detuvieron a
dos mexicanos, confiscándoles 12 pistolas, una subametralladora Mini
Uzi, 11 fusiles de asalto, 12 escopetas, tres lanzagranadas, entre ellos
un M79, un bastón chino, dos M72 LAW, 11 granadas de fragmentación, así
como miles de municiones, chalecos antibalas y gorros pasamontañas.
En el 2012, el Tribunal Militar del
Ejército de Guatemala investigaba cuatro casos de desaparición de armas
de los polvorines del Ejército, lo que incluía 554 fusiles Galil, y
decenas de lanzagranadas M79 y más de 7.000 cartuchos 5,56mm, y a la
procedencia de 9.000 armas con irregularidades en poder de civiles, que
se sospechaban eran propiedad del Ejército. Las principales perdidas se
habían llevado a cabo en la base militar Mariscal Zavala, la Dirección
General de Armas y Municiones y la Guardia de Honor, todos en la
capital, y en el Instituto Adolfo V. Hall, Chiquimula.
Todo ello evidencia la preferencia en la posesión de lanza granadas, tanto por las autoridades como por los grupos criminales. Muchas de esas armas provienen de los arsenales centroamericanos. Efectivamente, los lanzagranadas capturados en México parecían ser modelos modificados del M79. Esta arma es básicamente una escopeta monotiro que lanzagranadas de 40 x 46 mm a una distancia máxima de los 400 metros, y una efectiva a los 350, pero que necesita un mínimo de 30 metros para funcionar.
Cientos de estos M79 llegarían a Guatemala y Honduras, y unos 1.700, junto con otros 1.423 M203, llegarían a El Salvador en los ochenta. En esos países, el M79 es utilizado todavía como arma de primera línea. El peso del M79 siempre ha sido un asunto de discusión, pues con 2,93 kg cargado y 2,70 kg descargado, presenta problemas de movimiento. Su longitud de 73,1 cm también se considera una desventaja, por lo que soldados equipados con este arma generalmente cargaban una pistola en lugar de un fusil, y a veces recortaban el cañón y la culata del mismo.
Todo ello condujo a que fuesen substituidos por el modelo M203. El M79 nació del Proyecto Niblick de la Springfield y fue adoptado en servicio en diciembre de 1960 y distribuido en 1961. El M79 es considerado obsoleto, pero debido a su efectividad, sencillez, y puntería comandos navales estadounidenses SEAL, y fuerzas especiales de ese país, lo han regresado al servicio en Iraq y Afganistán.
Otra ventaja es que su diseño permite el uso de los últimos tipos de granadas de 40mm, que son más largas, y que no se pueden acomodar en los modelos M203. Esto ha llevado a que se introduzca un nuevo lanza granadas (M320), muy similar en concepto al M79, pero diseñado por la alemana HK.
En cuanto a los modelos militares, a pesar de sus cualidades, el peso y largo del M79 continua siendo un problema para el tamaño bajo estándar de los soldados centroamericanos. Lidiando con el mismo problema la Daewoo de Corea del Sur solucionó el problema de peso en el KM79 adaptándole una montura de polímero, pero no solucionó el asunto del largo.
Todo ello evidencia la preferencia en la posesión de lanza granadas, tanto por las autoridades como por los grupos criminales. Muchas de esas armas provienen de los arsenales centroamericanos. Efectivamente, los lanzagranadas capturados en México parecían ser modelos modificados del M79. Esta arma es básicamente una escopeta monotiro que lanzagranadas de 40 x 46 mm a una distancia máxima de los 400 metros, y una efectiva a los 350, pero que necesita un mínimo de 30 metros para funcionar.
Cientos de estos M79 llegarían a Guatemala y Honduras, y unos 1.700, junto con otros 1.423 M203, llegarían a El Salvador en los ochenta. En esos países, el M79 es utilizado todavía como arma de primera línea. El peso del M79 siempre ha sido un asunto de discusión, pues con 2,93 kg cargado y 2,70 kg descargado, presenta problemas de movimiento. Su longitud de 73,1 cm también se considera una desventaja, por lo que soldados equipados con este arma generalmente cargaban una pistola en lugar de un fusil, y a veces recortaban el cañón y la culata del mismo.
Todo ello condujo a que fuesen substituidos por el modelo M203. El M79 nació del Proyecto Niblick de la Springfield y fue adoptado en servicio en diciembre de 1960 y distribuido en 1961. El M79 es considerado obsoleto, pero debido a su efectividad, sencillez, y puntería comandos navales estadounidenses SEAL, y fuerzas especiales de ese país, lo han regresado al servicio en Iraq y Afganistán.
Otra ventaja es que su diseño permite el uso de los últimos tipos de granadas de 40mm, que son más largas, y que no se pueden acomodar en los modelos M203. Esto ha llevado a que se introduzca un nuevo lanza granadas (M320), muy similar en concepto al M79, pero diseñado por la alemana HK.
En cuanto a los modelos militares, a pesar de sus cualidades, el peso y largo del M79 continua siendo un problema para el tamaño bajo estándar de los soldados centroamericanos. Lidiando con el mismo problema la Daewoo de Corea del Sur solucionó el problema de peso en el KM79 adaptándole una montura de polímero, pero no solucionó el asunto del largo.
Es verdad que los carteles tienen fondos profundos que permiten
la adquisición y modificación de armas a su gusto, pero algunas de estas
modificaciones pueden ser económicas y sencillas, y al alcance de los
bolsillos de los países que las usan, y que prometen en realidad la
renovación del arma a una cualidad y capacidad de paridad a la de una
moderna y por una fracción del costo.
El M79 puede modificarse con una empuñadura de pistola y mira mejorada, además de una envestidura de polímeros remplazando la madera.
El M79 puede modificarse con una empuñadura de pistola y mira mejorada, además de una envestidura de polímeros remplazando la madera.
La aparición de estos plásticos resistentes y componentes
sintéticos, prometen aligerar el peso del arma. La adopción de una
culata plegable o retráctil promete solucionar el largo del arma sin
tener que cortar el cañón, y a todo se le puede agregar rieles MIL-STD
1913 Picatinny para colocarle toda clase de miras que proporcionen tiro
certero al máximo del alcance, y en cualquier tiempo, día y noche.
Al modelo M79 Milkor, realizado en Sudáfrica en los 80, se le instaló una empuñadura y una culata plegable del R4/R5 invertida. El DEFCOM XM79 sugiere el uso de una empuñadura de gatillo del M16, una envestidura al estilo espacial hecha de polímero, equipada con rieles MIL-STD 1913 Picatinny, una mira graduada hasta los 425 metros y una culata plegable.
Al modelo M79 Milkor, realizado en Sudáfrica en los 80, se le instaló una empuñadura y una culata plegable del R4/R5 invertida. El DEFCOM XM79 sugiere el uso de una empuñadura de gatillo del M16, una envestidura al estilo espacial hecha de polímero, equipada con rieles MIL-STD 1913 Picatinny, una mira graduada hasta los 425 metros y una culata plegable.
Aunque podría tratarse de modelos
comerciales, los modelos capturados a los capos mexicanos presentan
variaciones interesantes y fácilmente podría tratarse de M79 modificados
localmente. Llevan una culata muy similar a la del M16, con una
empuñadura con gatillo del mismo tipo, y un guardamano de polímero.
JMAH
defensa.com
Fotografías:
1. Captura por la Marina de México. (Foto - Cuartoscuro)
2. DEFCOM XL79
3. Soldado salvadoreño con un M79
4. Soldado con un M79 y banderola de munición de granadas de 40mm
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