El
futuro destructor Zumvalt (DDG-1000) será el primero de la más moderna
clase de destructores de la Armada estadounidense, de los que solamente
se construirán tres.
Los destructores clase Zumvalt surgieron como
consecuencia de la reducción de fondos del programa destructor del siglo
XXI, DD-21, como buque polivalente para guerra de superficie,
antisubmarina, antiaérea y para apoyo de fuegos naval en operaciones
terrestres. Inicialmente se había proyectado la construcción de 32
buques, pero su número se fue reduciendo, a 24, luego a 8 y, finalmente,
a 3, con un coste por buque de 3.300 millones de dólares. En 2008, la
Armada estadounidense señaló que ya no existía la necesidad para
construir el DDG-1000, debido a los cambios en las amenazas y se volcó
en la construcción de más destructores DDG-51 Arleigh Burke.
La
construcción del destructor comenzó en febrero de 2009 y, tras la
botadura, aún quedará por construir un 13% del casco antes de su entrega
a la Armada a finales de 2014. Dada la complejidad del primer buque de
esta nueva clase, la Armada realizará un proceso de recepcion en dos
fases. El astillero entregará el buque a la Armada, que activará la
activación de los sistemas de combate y realizará múltiples pruebas y
ensayos. Se espera que alcance su capacidad operativa inicial en 2016.
El
DDG-1000 es un 40% mayor que los destructores clase DDG-51Arleigh
Burque; tiene un desplazamiento de 14.500 Tm, con un casco inclinado
hacia dentro desde la línea de flotación (recogimiento de costados), muy
común en los buques de guerra de madera y en los acorazados de finales
del siglo XIX, lo que reduce la sección radar e incorpora muchas
tecnologías nuevas, incluyendo un sistema de energía integrado, que
suministra la energía a los motores eléctricos y a los sistemas de
armas, que podrían incluir, en el futuro, un cañón electromagnético
railgun o láser de electrón libre; una infraestructura informática
integral, que sirve como red de área local principal del buque; sistema
antiincendios automático y aislamiento automático en caso de que se
rompan los conductos de combustible; por su gran automatización, la
tripulación es menor, 130, con un destacamento de aviación de 28
personas, y los costes de funcionamiento durante el ciclo de vida serán
menores que los de buques comparables.
Para
las misiones de apoyo de fuego naval dispone de dos cañones avanzados
de 155 mm, de BAE Systems, que disparan proyectiles asistidos por
cohete, de gran alcance (LRAP), hasta 154 km, con ua gran precisión, 50 m
de error circular probable. Otros sistemas de armas con que cuenta son
20 lanzadores verticales, con cuatro alveolos, que lanzarán misiles
antiaéreos RIM-162 Evolved Sea Sparrow, misiles crucero Tomahawk y
cohetes antisubmarinos.
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