Plantear la posibilidad de importar buques de guerra 
de fabricación china a Rusia "es más oportuno que nunca", teniendo en 
cuenta que Francia no deja de especular sobre la suspensión de la 
entrega de los portahelicópteros de clase Mistral a Moscú.
Así lo considera un experto en temas navales, Alexánder Mozgovói, en un artículo publicado por la revista rusa 'Defensa Nacional'.
La compra de varias fragatas de la serie 054A podría compensar la 
incapacidad de construir un número suficiente y necesario de buques 
para la Armada rusa en los propios astilleros nacionales, asegura el autor. Incluso si París entrega los
 primeros dos Mistral como ha prometido, no se descarta que las propias 
naves de fabricación francesa necesiten un par de navíos de escolta cada
 uno. En esta función, les podrían servir las fragatas chinas.
La fragata del tipo 054A, alias 'Jiangkai II' –según la clasificación de la OTAN–
 sería un complemento perfecto para la Armada rusa por muchos motivos, 
sostiene el experto. Ante todo, el modelo se diseñó y construyó con 
ayuda del líder en materia naval, los Astilleros del Norte, que tiene 
sede en San Petersburgo. 
En segundo lugar, el barco puede equiparse con las armas y los 
sistemas electrónicos que Rusia y China desarrollan en estrecha 
cooperación. En tercer lugar, se trata de un buque de guerra avanzado 
que responde a las demandas rusas de posesión de armas potentes, la 
furtividad, la adaptabilidad y la gran capacidad de resistencia. 
Finalmente, afirma el experto, la fragata se ha manifestado eficaz 
durante los ejercicios navales conjuntos con una flotilla rusa llevados a cabo en mayo pasado.
Además, el buque del modelo 054A tiene un desplazamiento de poco más de 
4.050 toneladas, 131 metros de eslora y 16 metros de ancho. Puede 
alcanzar una velocidad máxima de 27 nudos. 
Sus armas de fuego incluyen
 dos lanzadoras de cuatro cañones cada una para los misiles C-803, 32 
pozos de lanzamiento para los misiles HQ-16, un trípode furtivo con una 
potente ametralladora de un calibre de 76 milímetros, dos ametralladoras
 de combate próximo, seis lanzadoras de torpedos y 12 lanzacohetes 
antisubmarinos. Además, la cubierta puede cobijar un helicóptero Kamov 
Ka-28 o su análogo chino, Harbin Z-9C.
Por supuesto, una fragata no podría sustituir la función de buque de
 asalto anfibio que destaca en el novedoso diseño francés. Pero este 
buque bien podría navegar acompañado por un par de simples lanchas de 
desembarco, a las que defendería con su gran potencia de fuego. 
© REUTERS Guang Niu
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