Las Fuerzas Armadas de Ucrania, atascadas en la operación en el este, han agotado sus recursos humanos y materiales, comenta Nezavisimaya Gazeta.
La muerte de un general que viajaba en el helicóptero derribado ayer 
por milicianos cerca de Slaviansk supuso un nuevo y duro golpe para la 
moral de las tropas ucranianas, ya de por sí lejos de estar alta.
La mayoría de soldados y oficiales no quieren combatir con sus 
conciudadanos, señala el diario, por lo que los que intervienen en 
combates son sobre todo efectivos de la Guardia Nacional y fuerzas de 
autodefensa regionales.
El ministro interino de Defensa de Ucrania, Mijaíl Koval, reconoció 
ayer que el Ejército no tiene personal para poder llevar a cabo la 
rotación.
Además, casi 6.000 soldados dejarán próximamente las filas del 
Ejército al vencer el plazo del servicio militar obligatorio que 
cumplen. El ministerio trató de prorrogar su servicio hasta que finalice
 la operación en el este, pero las enérgicas protestas de familias de 
los soldados le obligaron a desistir del plan.
La rotación de tropas tampoco es posible debido a la escasa 
financiación y ausencia de infraestructura militar en el este de 
Ucrania, que tenía acuarteladas prácticamente la totalidad de sus tropas
 en regiones occidentales. El traslado del personal y material bélico al
 lugar de la operación derivó en gastos multimillonarios, indica el 
diario.
Según Nezavisimaya Gazeta, la dramática situación que viven 
hoy las Fuerzas Armadas de Ucrania, se remonta a 1992, cuando Kiev 
decidió que debía ingresar en la OTAN y por tanto no necesitaba reforzar
 su Ejército.
Es más, la institución armada se convirtió en una fuente de ingresos 
que se obtenían con la venta de centenares de carros de combate, 
helicópteros y aviones heredados de la URSS. En los últimos 23 años, el 
Ejército ha recibido tan solo 10 tanques y unos 80 blindados que había 
rechazado Irak por tener grietas en la coraza.
“La guerra en el sureste ha sido desde el principio una guerra de 
agotamiento que no parece tener fin. Pero mientras las milicias 
mantienen su afán de combatir hasta lograr la victoria, las tropas 
regulares y la Guardia Nacional han agotado sus recursos tanto humanos 
como materiales”, concluye el rotativo.
Nezavisimaya Gazeta
© REUTERS/ Baz Ratner
© REUTERS/ Baz Ratner
RIA Novosti 









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