En virtud del documento, suscrito antes de la visita que el presidente de China, Xi Jinping,
 realizó la semana pasada a Moscú, el país asiático adquirirá 24 aviones
 Su-35 y cuatro sumergibles diesel-eléctricos clase Lada. De realizarse 
este proyecto, será la mayor entrega de armamento ruso a China de los 
últimos diez años.
Entretanto, el jefe del departamento militar ruso, Serguei Shoigu destacó ayer como “hecho emblemático”
 la visita de Xi Jinping al Ministerio de Defensa de Rusia el pasado 
sábado. “Para Rusia es una confirmación más de que el ámbito militar y 
técnico-militar es el prioritario en la cooperación entre los dos 
países”, aseveró Shoigu, cuyo primer destino extranjero en calidad de 
titular de Defensa fue precisamente China.
Según la parte china, Pekín estudia la posibilidad de aumentar las 
compras de armas rusas. Se trata, en particular, de los sistemas de 
defensa antiaérea S-400, motores pesados 117C, aviones de transporte 
Il-76 y aviones nodriza Il-78.
Por su parte, medios rusos comunicaron este mes de marzo que a 
finales de 2012, la exportadora estatal de armas rusa Rosoboronexport  y
 el Ministerio de Defensa de China firmaron un acuerdo preliminar sobre 
el suministro de 24 cazas Su-35 al país asiático. El valor del contrato 
se estima en 1.500 millones de dólares.
El submarino convencional del proyecto 677, clase Lada o Amur-1650 en
 su modalidad de exportación, puede navegar en inmersión más de 25 días,
 frente a un promedio de 15-20 días que tienen los sumergibles 
extranjeros.
El Amur-1650 está dotado de misiles antibuque y torpedos universales.
 También es capaz de destruir blancos terrestres mediante un lanzamiento
 múltiple de misiles de crucero.







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