Arabia
Saudí desplegó todo su arsenal de aviones de combate para golpear las
posiciones de los insurgentes hutíes en Yemen, en el marco de la
operación Tormenta de la Firmeza lanzada conjuntamente con una decena de
países árabes, informó la televisión Al Arabiya.
Además
del modelo europeo Eurofighter Typhoon, los saudíes utilizan en esta
ofensiva los aviones estadounidenses F-15 y los Tornado británicos.
La Fuerza Aérea saudí cuenta con 152 cazas biplaza Strike Eagle, el
tercer parque de los F-15 después de EEUU y Japón. En 2009, los F-15
saudíes bombardearon junto con los Tornado los objetivos hutíes en el
norte de Yemen.
También los Typhoon al servicio de Riad, 42 en total, tienen
experiencia de combates. En febrero pasado realizaron ataques contra los
yihadistas del Estado Islámico (EI) en Siria.
En cuanto a los Tornado, los saudíes disponen de 80 aviones, algunos
de los cuales participaron en la Guerra del Golfo contra las tropas de
Sadam Husein en Kuwait.
En la operación contra los hutíes, Arabia Saudí implicó 100 aviones de combate, 150.000 efectivos así como unidades navales.
En 2014, Arabia Saudí fue el mayor importador de equipos de defensa,
de acuerdo con un informe publicado por la empresa estadounidense IHS
Jane"s.
Sus Fuerzas Armadas incluyen 227.000 efectivos, incluidos 75.000 en
el Ejército, 13.500 en la Marina y 20.000 en la Fuerza Aérea; hay otros
100.000 en la Guardia Nacional, 16.000 en defensa antiaérea, 2.500 en
unidades de misiles estratégicos y 24.500 paramilitares, según el
Instituto Internacional de Estudios Estratégicos.
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