El
enclave occidental de Rusia, Kaliningrado, es desde ayer escenario de
un gran ejercicio de las Fuerzas Armadas rusas.
El Ministerio de Defensa
no oculta que responde así a las maniobras internacionales Saber Strike y Baltops que la OTAN realiza estos días en la zona del Báltico, comenta Rossiyskaya Gazeta.
Es más, los generales rusos afirman que el número de las fuerzas que
participan en el entrenamiento de Kaliningrado es equiparable al de las
tropas aliadas enviadas a las fronteras con Rusia, señala el diario.
Inicialmente, recuerda, la Armada rusa estaba invitada a participar
en las maniobras navales Baltops. Sin embargo, a raíz de la crisis
ucraniana la dirección de la OTAN decidió suspender la cooperación
militar con Moscú y retiró la invitación.
Ahora, los buques de guerra rusos que iban a participar en el
ejercicio naval aliado intervienen en las maniobras en Kaliningrado.
En cuanto a las fuerzas terrestres y aéreas del simulacro, incluyen
unidades de la 76ª División de Pskov y de defensa antiaérea, tropas
aerotransportadas, Infantería de Marina, cazabombarderos Su-34, helicópteros Mi-24 y aviones estratégicos Tu-22M3.
Tras ser trasladados a Kaliningrado por aire, los “boinas azules”
(paracaidistas) junto con los marines impedirán el desembarco "enemigo"
en la costa rusa y combatirán contra grupos armados, con el apoyo de los
Su-34 y Mi-24 desplazados desde regiones centrales de Rusia.
Mientras tanto, los bombarderos estratégicos Tu-22M3 patrullarán el
cielo del Báltico ruso y las tripulaciones navales se encargarán de
vigilar la frontera localizando y destruyendo buques y submarinos
"enemigos".
Las unidades de defensa antiaérea tendrán asignado un cometido acorde
con sus funciones: proteger la zona de maniobras de ataques desde el
aire y el mar.
Rossiyskaya Gazeta
© RIA Novosti. Igor Zarembo
© RIA Novosti. Igor Zarembo
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