En
España ha comenzado el despliegue de los destructores del escudo
antimisiles europeo de la OTAN. El navío estadounidense Donald Cook ya
está en la base de Rota.
La nave ha atracado este martes y es el primero de los cuatro buques
que llegarán: el segundo, el destructor Ross, llegará en junio, y otros
dos, el Porter y el Carney, en el año 2015. Con el motivo de la llegada
del Donald Cook ,
el secretario de la Armada de Estados Unidos, Ray Mabus, se encuentra
de visita en España.
Se informa de que los cuatro barcos, dotados del
sistema de radares Aegis y diseñados para destruir aviones, misiles,
submarinos y embarcaciones, realizarán operaciones en el Mediterráneo y
el Norte de África.
Sin embargo, el despliegue ha provocado una polémica en un
sector de la población española.
Algunas voces afirman que la presencia
de efectivos de EE.UU. en Andalucía pone a la región en el punto de mira
a nivel internacional.
"No
creo que la población española sea consciente de los riesgos que supone
tener esta instalación. A mí me preocupan sobre todo las implicaciones
éticas y morales que supusieron que un presidente como era Rodríguez
Zapatero, que estaba en funciones […], se plegara a los intereses
estadounidenses con esta instalación con unas condiciones que seguimos
sin conocer", dijo a RT el activista contra la militarización Alberto
Nájera López.
El acuerdo entre Madrid y Washington entró en vigor el pasado mes de
junio bajo las críticas de Rusia, que considera el despliegue del
escudo antimisiles de la OTAN en Europa una amenaza a sus intereses estratégicos .
El convenio implica ejercicios y operaciones conjuntas entre las
fuerzas españolas y estadounidenses, administración, mantenimiento,
comunicaciones y servicios de apoyo para una estación naval, incluida
una unidad de tierra, mar y aire, un escuadrón de patrulla marítima, un
escuadrón de reconocimiento aéreo de la flota y un destacamento de
aeronaves basadas en porta-aeronaves para estacionamiento temporal,
según detalla el portal español La Voz Digital .
El acuerdo incluye también un terminal de transporte aéreo militar,
despliegue y tránsito de aeronaves de EE.UU., atracaderos y fondeaderos y
apoyo logístico a la flota, batallón de construcciones, estación naval
de comunicaciones, compañía de fuerzas de seguridad, unidad de
investigación criminal, destacamento para una terminal de correo aéreo,
una estación meteorológica, mando de gestión de contratos de defensa y
una instalación de información para vigilancia oceánica de la flota.
Con los cuatro navíos llegarán a Rota unos 1.200 marinos,
acompañados de 1.500 familiares, lo que duplicará la población
estadounidense en la base naval y la situará en unas 6.000 personas,
convirtiéndose así en la base naval europea con más efectivos de EE.UU.
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