El gobierno ucraniano ha
aprobado la producción en serie del avión de transporte Antonov An-70,
lo que supone la próxima entrada en servicio en las Fuerzas aéreas de
dicho país. Ha sido el Ministerio de Defensa ucraniano el que ha tomado
la decisión después de que finalizara en abril del año pasado la campaña
de pruebas. Aunque se ha dado luz verde a la empresa, aun no han
transcendido el número de unidades que va a fabricar Antonov State
Enterprise.
El An-70 es un proyecto conjunto
ruso-ucraniano para un avión de transporte de avanzadas prestaciones en
la línea del A-400M de Airbus Military Aircraft. El acuerdo entre ambos
países contemplaba el ensamblaje final del avión en la planta rusa KAPO
en Kazán, suministrando Antonov estructuras completas de ala y fuselaje y
los motores.
Rusia habría estado interesada en adquirir hasta 60
aviones para renovar la flota de transporte junto al Il-476 pesado. Está
propulsado por cuatro motores D-27 asociados a parejas de hélices
contra contra-rotatorias SV-27 y dispone de capacidad para despegue y
aterrizaje en corto espacio (Short Takeoff and Landing o STOL).
Su
bodega de carga permite transportar 425 metros cúbicos y entre sus
prestaciones están por ejemplo la capacidad para transportar 20
toneladas a 3.000 kilómetros, aterrizando en pistas no preparadas de 800
metros de longitud.
Está diseñado para operar autónomamente en
aeropuertos con pocos apoyos, ya que incorpora tanto medios de carga o
descarga propios como medios de mantenimiento o puesta en marcha. El
desarrollo del avión ha sufrido numerosos varapalos desde que comenzó en
los ochenta, el último la marcha del apoyo ruso dadas las relaciones de
los gobiernos de ambos países.
El 10 de abril el avión de transporte militar Antonov AN-70 realizó el último de los vuelos de pruebas programados por el Gobierno ucraniano para validar sus aptitudes.
El 10 de abril el avión de transporte militar Antonov AN-70 realizó el último de los vuelos de pruebas programados por el Gobierno ucraniano para validar sus aptitudes.
Durante estas pruebas se comprobó el
correcto funcionamiento de los sistemas de a bordo, la resistencia del
fuselaje, el aterrizaje en pista corta y la capacidad para transportar
cargas militares estandarizadas. La Fuerza Aérea ucraniana ha aportado
el personal del Centro Científico y Técnico Estatal (State Scientific
and Test Center) que trabajan junto al personal de la empresa.
Dado que las pruebas de aceptación
resultaron totalmente satisfactorias, el avión se considera listo para
la producción en serie y su incorporación a la Fuerza Aérea ucraniana.
Sin embargo resulta complicado que Ucrania pueda adquirir un número
significativo de aviones en la situación actual de bancarrota.
(J.N.G.)
defensa.com
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