Responsables del programa
de avión de combate danés se han puesto en contacto con fabricantes
aeronáuticos para recabar información de sus modelos de cara a reabrir
el programa de adquisición de un avión de combate.
Se pretende adquirir
entre 24 y 30 aviones que sustituyan a los F-16 que tienen en servicio y
que deberán entrar en servicio entre 2020 y 2024 cuando estos hayan
finalizado su vida útil.
Es el proceso conocido como Request for
Binding Information (RBI), y en él se han puesto en contacto con las
estadounidenses Boeing por su F/A-18F Super Hornet y a Lockheed Martin
por el F-35A Joint Strike Fighter además de a las europeas Saab por el
Gripen E y al consorcio Eurofighter por el Typhoon. No se ha solicitado
información al fabricante galo Dassault Aviation para el Rafale.
Los fabricantes deben remitir la información en julio para que se pueda realizar una selección a mediados del año que viene. Se tendrán en cuenta aspectos como la capacidad para actualizar las capacidades del avión, tiempo estimado de vida operacional, costes de mantenimiento y operación así como compensaciones industriales a las industrias danesas.
Dinamarca forma parte del programa multinacional JSF liderado por Estados Unidos desde 2002 sin embargo la industria de defensa danesa ha expresado su descontento con la carga de trabajo recibida del programa, por lo que no es seguro que se apueste por este avión puesto que no existe aún ningún compromiso de adquisición.
(J.N.G.)
defensa.com
0 comentarios:
Publicar un comentario