Cuatro
buques de desembarco de la Flota rusa del mar Negro se dirigen al
Mediterráneo para cumplir misiones de patrullaje, comunicó hoy el
Ministerio de Defensa de Rusia.
"Al finalizar las maniobras navales realizadas del 19 al 29 de enero
en los mares Negro y Mediterráneo, el departamento militar ruso decidió
prolongar las misiones de los navíos rusos en el Mediterráneo", señaló
el comunicado.
En particular, se trata de los buques de desembarco Kaliningrad y
Shabalin, que zarparon de Novorossiysk y próximamente llegarán a la zona
este del Mediterráneo, y de los buques de desembarco Saratov y Azov que
se les unirán a finales de febrero.
"Más adelante, el número y el tipo de los buques rusos podrán variar según la situación en la región", agrega la nota.
Por otra parte, una fuente diplomática dijo a RIA Novosti que los
buques rusos en caso necesario podrían repatriar a ciudadanos rusos de
Siria.
"Las tareas que cumple el grupo naval ruso en el Mediterráneo no se
desvelan, pero el desarrollo de la situación en esta región y la
presencia de buques de desembarco permiten suponer que la tarea
principal será repatriar a ciudadanos rusos de Siria", comentó la
fuente.
Desde marzo de 2011, Siria es escenario de un violento conflicto entre las autoridades y la oposición armada que ya causó unos 70.000 muertos, según datos de la ONU.
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