En una rueda de prensa en el interior del navío, el capitán ha destacado que el barco ha llegado al puerto ceutí en la última escala de su crucero con el objetivo de comprobar el funcionamiento de sus equipos y sistemas durante un período prolongado de navegación de 40 días.
Cristóbal González-Aller señaló que el barco tiene previsto incorporarse a la flota en diciembre ya que, previamente, tiene que pasar unas pruebas de carga de material del Ejército de Tierra este mismo mes y después del verano realizará un ejercicio de lanzamiento de los aviones. Explicó que, finalmente, en el mes de noviembre se efectuará la calificación operativa del buque "que es un tipo de barco muy útil para los escenarios del futuro bien de paz, de ayuda humanitaria o de conflicto".
El barco, que dispone de tres cubiertas de 5.000 metros cuadrados de superficie en su conjunto, es el más grande de la Armada española y tiene una "multifunción" ya que puede ser empleado como buque anfibio para operaciones de desembarco de la Infantería de Marina y también para transporte estratégico, buque de ayuda humanitaria o de alternativa al portaaviones "Príncipe de Asturias", ha comentado el capitán. El "Juan Carlos I" está actualmente en su primer año de funcionamiento en unas pruebas que comenzaron el pasado septiembre y acaba de culminar una de las más importantes: estar 40 días seguidos navegando. "Antes visitamos los puertos de Las Palmas y Cartagena y después de esta prueba satisfactoria de navegación volveremos a Rota", dijo el oficial.
El navío, con capacidad para 1.435 hombres, ha sido diseñado en El Ferrol "y ya se están construyendo otros dos similares para Australia y otras armadas han mostrado su interés en este tipo de buque que es muy funcional", ha comentado. El "Juan Carlos I" dispone, además, de dos quirófanos y una UCI con ocho camas "en un hospital amplio y moderno" y una característica "importante" es que todos los sistemas de radar son españoles.
Fuente : EFE
Entradas
0 comentarios:
Publicar un comentario